<body><script type="text/javascript"> function setAttributeOnload(object, attribute, val) { if(window.addEventListener) { window.addEventListener('load', function(){ object[attribute] = val; }, false); } else { window.attachEvent('onload', function(){ object[attribute] = val; }); } } </script> <div id="navbar-iframe-container"></div> <script type="text/javascript" src="https://apis.google.com/js/platform.js"></script> <script type="text/javascript"> gapi.load("gapi.iframes:gapi.iframes.style.bubble", function() { if (gapi.iframes && gapi.iframes.getContext) { gapi.iframes.getContext().openChild({ url: 'https://www.blogger.com/navbar.g?targetBlogID\x3d12082642\x26blogName\x3dCampe%C3%B3n+de+Boca\x26publishMode\x3dPUBLISH_MODE_BLOGSPOT\x26navbarType\x3dBLUE\x26layoutType\x3dCLASSIC\x26searchRoot\x3dhttps://campeondeboca.blogspot.com/search\x26blogLocale\x3des_419\x26v\x3d2\x26homepageUrl\x3dhttp://campeondeboca.blogspot.com/\x26vt\x3d7529542232957936370', where: document.getElementById("navbar-iframe-container"), id: "navbar-iframe" }); } }); </script>

Campeón de Boca

domingo, noviembre 24, 2013

¿Así quieren salir campeones?

Boca Juniors 0 - All Boys 2

Un título duro, pero no tanto como esta nueva derrota xeneize. Y esta vez no creo que haya lugar para milagros o más regalos de los rivales en este campeonato que nadie parece querer ganar. Todos los partidos clave por el torneo, Boca los perdió (y muy feo). Así fue ante San Lorenzo, Arsenal y ahora ante All Boys, luego de una semana donde parecía consumado que no tendríamos chances de pelear el título, pero una serie de resultados de los de arriba parecían darnos, increíblemente, una última oportunidad. Pero Boca jugó un partido vergonzoso, casi sin enterarse de que esta era una verdadera final que, de ganarla, nos dejaría expectantes a un punto (al menos hasta Ñuls terminara su encuentro, que finalmente fue empate).
Boca arrancó decidido, pero al cuarto de hora salió lesionado Riquelme. En su lugar ingresó Paredes, de muy mal partido. Pareciera que la ausencia de Román pinchó al equipo, que desde su salida nunca pudo manejar criteriosamente el balón y casi no llegó a la portería defendida por Cambiasso. All Boys no tuvo peso ofensivo en la primera mitad, pero defendió con mucho orden y no tuvo sobresaltos defensivos.
Pero el complemento fue de terror. De arranque nomás, Boca descuidó a Battión en un corner y el Albo se puso 0-1 arriba. Unos minutos más tarde, el árbitro cobró un penal a favor de los visitantes tras omitir un claro offside. Poco le importó a Matos, y la cosa quedó 0-2.
Como sabrán, esta tarde no hubo lugar para milagros (como ante Tigre). Pero más caliente y dolido por la derrota en sí, lo que realmente me decepciona es la forma. El equipo no tuvo ideas, pero tampoco rebeldía y coraje para, al menos, ganar todas las divididas y meter aunque fuere a puro pelotazos al rival contra su arco. All Boys estuvo más cerca de haber anotado el tercero que nosotros el descuento.
Al escribir esta nota tan tarde, tuve la chance de escuchar parte de la conferencia de prensa de Bianchi, y créanme que me sacó las palabras de la boca (o de las manos). ¡100% de acuerdo con el gran DT! Hoy la hinchada xeneize dio un ejemplo de fidelidad y amor por los colores, estando a la altura de nuestra historia. Pero los jugadores no dieron la talla para salir campeones. Perdimos con Ñuls (OK, al inicio del torneo), San Lorenzo, Arsenal... y así y todo seguíamos con chances porque dichos rivales perdieron puntos en las últimas semanas. Ahora, ¿qué esperan los jugadores xeneizes? ¿que los rivales se hagan los goles en contra? ¡No, viejo! Tenían que ganar hoy para, al menos, llegar con pretensiones a las últimas fechas. A falta de 2 encuentros quedamos a 4 puntos de San Lorenzo, pero... ¡con 5 equipos arriba nuestro! El tema lesiones fue terrible, pero tampoco sirve de excusa: regalamos un campeonato que, con muy pero muy poco, pudimos habernos llevado. Ahora sólo queda despedirse ganando los dos encuentros restantes, y pensar muy bien quiénes podrán reforzar este plantel que, todo parece indicar, el próximo año sólo jugará por el torneo local.

Etiquetas:

domingo, noviembre 17, 2013

Nuevamente, la ilusión al Viaducto

Arsenal 3 - Boca Juniors 2

El Torneo Inicial le había dado una nueva chance a Boca, que en caso de ganar llegaría, al menos transitoriamente, a la cima junto a San Lorenzo (recordemos que mañana juega Ñuls). Sin embargo, el equipo volvió a fallar en un encuentro decisivo y ante un rival directo.
Fue una verdadera decepción la actuación xeneize de esta tarde/noche en Sarandí. Nuevamente, se perdió (y feo) justamente en una final; en esos encuentros que hay que ganar o ganar si uno quiere ser campeón. Y por favor, no me vengan con la sanata de que perdimos por un gol y tuvimos dos pelotas en los palos. Porque el resultado no reflejó la supremacía que por momentos tuvo Arsenal, pero por sobre todo la resignación e impotencia que durante varios minutos mostró este Boca blandito y tibio.
Quizás haya que resignarse y entender que este Boca llegó a lo más lejos que se podía, considerando todos los contratiempos, lesiones y otros pormenores. Eso no está en nuestro diccionario: somos Deportivo Ganar Siempre. Pero si analizamos el torneo con la cabeza fría, sabremos que fueron pocos los partidos que se jugaron bien, y que no siempre se puede hacer la heroica como ante Tigre,
Arsenal fue muy superior el primer tiempo, y el 2-0 parcial con el que se fue al descanso pudo incluso sonar escaso. Vale aclarar, que el primer tanto nació de un tiro libre inexistente, y que otro horror del árbitro fue no expulsar a Damián Pérez ante la criminal entrada al Cata Díaz (que era roja y tres años de cárcel). Pero lo del xeneize fue tan pobre que ni vale la pena escudarse en el pito.
Riaño había tenido en sus pies el descuento cuando se extinguían los primeros 45, pero el travesaño dijo no. Sin embargo, apenas comenzado el complemento, Matías Caruzzo de cabeza puso las cosas 1-2. Ahí parecía que Boca se metería en partido y remontaría las cosas como ante Tigre. Pero digo bien, parecía... porque en menos de 5 minutos los locales volvieron a aumentar la ventaja. ¡No se explica que el equipo defienda tan mal, viejo! Pero lo peor, lo imperdonable, fueron los vergonzosos 20 minutos que prosiguieron al tercer gol de Arsenal. Boca pareció abatido, sin ánimo de ir a pelear el encuentro (con varios minutos por delante) y perdió todas las pelotas divididas. Bianchi acertó con los cambios y, en una jugada aislada, Riaño marcó su debut goleador con la auriazul. Con 15 minutos por jugar, Boca pareció despertarse y acordarse de que aún se podía. Y lo más triste de todo, que pudo tranquilamente haberlo empatado (lo que me irrita más, pensando en todos los minutos despilfarrados). Lo tuvo Paredes en un remate, y también Gigliotti, pero nuevamente un palo nos negaría llevarnos, al menos, algún punto que créanme, no merecimos.
No se puede decir que se haya acabado el campeonato, pero hoy más que nunca, la lógica pesa más que la matemática. Seamos optimistas, ilusos si me lo permiten, y soñemos con que los rivales dejen puntos en el camino. Ahora, ¿realmente piensan que así Boca puede ganar los 9 puntos en juego?

Etiquetas:

domingo, noviembre 10, 2013

El celular de Díaz

Boca Juniors 2 - Tigre 1

No se trata del famoso celular de Dios que le adjudican al Virrey, sino de una réplica que bien podríamos bautizar como el celular de Díaz. Claro, en homenaje al Cata, que atendió el llamado tras el centro de Román para consumar una victoria tan agónica como fundamental.
El de hoy fue un partido tan raro y loco como el mismísimo andar xeneize en el torneo. Boca hizo méritos como para ganarlo, pero sin embargo jugó un partido de discreto a pobre. Tigre abrió el marcador casi sin llegar al arco; increíble, pero el peligro que no generan los rivales lo fabrican los mismos jugadores boquenses, o en este caso, el Chiqui Pérez. Es fácil hablar con el diario del lunes (o del domingo a la noche), pero creo que fue un error de Bianchi no haberle dado el puesto de central a Ribair Rodríguez, que venía de buenas actuaciones en ese sector.
Como les decía, Tigre salió a la cancha con un esquema más que conservador, pero casi sin llegar encontró la ventaja merced a un gol en contra de Claudio Pérez. Con mucho tiempo por jugar, Boca trató de no desesperarse y continuó atacando y manejando el partido a voluntad. Sin embargo, las pocas situaciones claras de peligro fueron bien resueltas por el ex arquero xeneize Javier García. El 0-1 parcial no reflejó lo que pasó en los primeros 45 minutos, pero Boca tampoco fue un aluvión, claro está.
En el complemento bastó un lapso de diez minutos para que Tigre se quede con uno menos. Las dos amarillas a Pérez García parecían ser decisivas para los minutos que se vendrían. Pero para nuestro mal, Boca tuvo más posesión pero menos claridad que en el primer tiempo, a pesar de que Bianchi fue acumulando delanteros hasta terminar jugando con cinco atacantes (Martínez, Gigliotti, Cángele, Blandi y Riaño) más dos enganches (Riquelme y Paredes). A esa altura la cosa era clara: matar o morir. Y no era para menos, porque mismo un empate nos dejaba prácticamente sin chances de campeonar.
¿El final? ¡Épico! Casi a los 40 del complemento, Riquelme sorprendió en un tiro libre abriéndosela a Paredes para que el juvenil saque un sablazo desde muy lejos y venza finalmente la resistencia del portero visitante. Y con tamaño envión anímico, quedó abierta una luz de esperanza. Esperanza que se tornó realidad cuando ya en el descuento, nuevamente Riquelme sorprendió en otro tiro libre y luego de amagar un pase y desmarcarse, ejecutó un preciso centro para que nuestro héroe, el Cata Díaz, prenda el celular y disque al gol.
¡Triunfazo xeneize para dejar viva la llama de la ilusión! Ahora muchachos, hay que hacer bastante más en los próximos encuentros si queremos llegar con chances al cierre contra Gimnasia en la Bombonera. En lo anímico, 10 puntos. En lo futbolístico, aún seguimos muy endeudados.

Etiquetas: