Maldita punta
¡Qué paradoja! En estas dos últimas fechas Boca bajó de la punta a sus rivales, y sin embargo, cada vez se alejó más de la cima. Y claro, los empates restan más de lo que suman.
El xeneize arrancó con todo. Ya a los 2 minutos de juego, Villar le sacó una pelota increíble a Palacio. Boca parecía dispuesto a llevarse por encima al local y aprovechaba siempre su ataque izquierdo, donde la movilidad del delantero bahiense anudaba las piernas de los defensores locales. En uno de esos desbordes, Palacio mandó un centro punzante que Ledesma tiró por encima del travesaño de manera increíble.
Si bien el marcador no se inauguraba, merecíamos un poco de mejor suerte que ese 0-0 con el que se extinguieron los primeros 45 minutos.
El segundo tiempo no arrancó tan bien para nosotros. Ñuls presionaba en toda la cancha, Boca también, pero el juego era pobre y no había muchas situaciones de gol. Esos primeros minutos fueron los únicos donde, sin ser brillante, el local era un poquitito más que el campeón. Y allí llegó justamente el gol leproso: clarísima falta contra Ibarra que Baldassi ignora, y en la contra, foul y gol luego de una serie de rebotes.
¡Injusticia! Al margen de otro error de los pitos en contra de Boca, el resultado no estaba acorde al desarrollo del partido, sobre todo por el primer tiempo xeneize. Había que salir con todo a buscar el empate, pero por suerte, sólo tuvimos que esperar 5 minutos. Gran desborde del eterno Pampa Calvo, centro atrás, y gol de Palacio (el jugador del partido).
Y créanme que no hubo mucho más. Porque Ñuls no quiso y Boca no pudo.
Etiquetas: Torneo Clausura 2006