Domador de leones

Estudiantes 1 - Boca Juniors 3

Quizás este sea el partido más difícil de analizar en toda la campaña, por las suspicacias que lo rodeaban (al igual que River vs. Gimnasia, jugado un par de horas antes).
Estudiantes estuvo lejos de ser el león con el que lo apoda su gente; en realidad, fue un gatito casi inofensivo. Habrá que ver en cuánto influyó su gente, que definitivamente quería perder para no favorecer a su rival platense en la lucha por el título, o el gol tempranero de Ledesma, que a los 2 minutos ya le daba la ventaja a Boca.
Lo concreto es que el primer tiempo mostró una gran paridad, un mal desempeño de Boca y algunas jugadas para el equipo local, que aunque no tenía profundidad se encontraba con algunos regalitos de nuestra defensa. El más generosos de ellos fue haberle permito entrar solo a Bastía para que cabeceara marcando el empate. Pero por suerte, un minuto después llegó la devolución de gentilezas, y ante un off side mal tirado por la defensa del Pincha, Palacio estampó el 2-1.
El segundo tiempo fue otra historial. Los jugadores de Boca se replegaron, ahorraron energías y apostaban todo al contraataque. ¿Estudiantes? Casi no creo situaciones de peligro.
Sobre el final del partido, en una muy buena jugada colectiva Guillermo selló el 3-1 final. Un resultado tan justo como previsible.
Y ahora... ¡se viene la recta final! Hay que ganar en Chile para llegar a la final de la Copa Sudamericana, y el domingo, cueste lo que cueste, el domingo tenemos que ganar.

Mal parado

Boca Juniors 2 - Universidad Católica (Chile) 2

El futuro de Boca en la Copa Sudamericana es de pronóstico reservado. Si bien los hinchas xeneizes bien conocemos de noches épicas y remontar resultados adversos, deberemos escribir una nueva página, pensando en que enfrente habrá un equipo previsiblemente difícil.
Se sabía que no sería una partido sencillo, y los primeros 45 minutos lo dejaron más en claro aún. Boca nunca pudo hilvanar jugadas y el equipo visitante se dedicó a defenderse con la pelota, creando las únicas (y escasas) situaciones de gol de esa mitad.
Cabe recordar que Boca tenía algunos suplentes como Morel Rodríguez, Ledesma y los regresos de Bilos e Ibarra luego de su larga inactividad.
El segundo tiempo arrancó con todo; estaba visto que el 0-0 no duraría mucho. La entrada de Insúa, de gran presente, le dio vértigo y más control de balón al equipo.
Lo tuvo Guillermo con un tiro cruzado, luego Palermo reventó el palo, hasta que finalmente, el Pocho conectaría de cabeza un centro del mellizo.
Boca era más y lo empezaba a justificar en el marcador. Era nuestro mejor momento, pero... ¡zas! Una distracción defensiva, y tras una pelota parada nos cabecean en el área chica para empatar el marcador. Y ni hablar que 4 minutos más tarde, otro error en el fondo nos ponía 1-2.
No suelo ser pesimista, pero en ese momento dije: "o lo empatamos pronto, o chau Copa".
Boca fue, Católica se tranquilizó, y cuando todo parecía perdido, apareció Palermo (por fin) para sellar el 2-2. Los últimos minutos mostraron a un Boca desesperado, con situaciones a favor pero escasa puntería.
Así que amigos, si queremos estar en la final, habrá que ganar en Chile (o empatar por más de 2 goles). Desde ya que será una misión difícil, pero... ¡somos Boca, carajo!

Ganó la B larga

Boca Juniors 2 - Vélez Sarsfield 0

¡Éste era el partido que esperábamos los hinchas xeneizes!
Aunque alguno me lo discuta, hoy Boca lo pasó por arriba a Vélez. Es verdad, por momento faltó algo de fútbol. Pero el equipo fue el único protagonista y luchó cada pelota como si fuera la última... ¡como manda nuestra historia! Battaglia y Gago fueron dos leones en el mediocampo, Insúa cada vez está más enchufado y la defensa convirtió al Pato en un espectador de lujo.
El primer tiempo fue áspero, luchado, con poco fútbol. Pero atención: Boca proponía e iba para el frente, y Vélez esperaba y se defendía cortando todo el tiempo con infracción. Se turnaban para hacer pequeños foules, mientras el árbitro se hacía el distraído.
En esa mitad, créanme, Boca llegó 3 veces y el Pato no tocó una pelota. Pero ni una. Sin embargo, el 0-0 no se quebraba.
El segundo tiempo arrancó igual, con el xeneize yendo al ataque y el equipo visitante con los 11 en su campo. Hasta que el Pocho Insúa definió con maestría una jugada y se abrió el partido. Bah, ¿se abrió el partido? No tanto, porque Vélez insinúo con ir, pero no creó ni una sola situación de gol. Y claro, ahora las infracciones eran cada vez más violentas y desleales por la impotencia de la visita. Como la jugada de Bustamante, quien luego de cuatro patadas seguidas sin pelota a Palermo vio la tarjeta roja. Ahora... ¡¿por qué la roja a Palermo?! Martín no reaccionó, no pegó, no empujó... ¿por qué lo expulsaron? Grondona, si Boca no tiene que salir campeón, avisá y nos dedicamos sólo a la Sudamericana.
Ya sobre el final del partido entró el Guille, y tras un centro suyo Insúa selló el 2-0.
Boca demostró que si quiere, está para pelear bien arriba. Y Vélez, que no es ni el décimo grande.

Viaducto embrujado

Arsenal 4 - Boca Juniors 1

Parece mentira. Es de no creer. Ni el más pesimista hincha de Boca podría imaginar una tarde tan negra como la que nos tocó padecer.
Boca jugó en Sarandí su peor partido del año (sí, del año, peor aún que contra las Chivas) y quedó muy lejos del campeonato. Si bien Gimnasia lleva 3 puntos y quedan 12 en juego, Boca tiene un fixture complicadísimo, y al cansancio se suma otro enemigo indeseado: el factor anímico.
El partido empezó con un presagio negro que marcaría la tarde. Un pelotazo encuentra dormidos a los centrales y Arsenal pone el 1-0 en su primer llegada. Boca no tenía la pelota y era puro nerviosismo. A los 25 minutos, roja para el debutante Barroso. Y a los 29, 2-0 para los locales.
El tempranero cambio de Cardozo por Marino dio rápidamente sus frutos; luego de un pase de Neri, Insúa puso el descuento. Y ahí se vio lo único bueno de Boca en toda la tarde: el último cuarto de hora del primer tiempo. Con 10 hombres, Boca llegó y tuvo un par de chances para igualar.
El segundo tiempo arrancó igual que el primero. Otra distracción de Boca que se paga con un gol en contra. Y de ahí en más, la historia ya es tan triste como conocida. Vino el cansancio (en realidad, parece no haberse ido desde el partido contra Colón), las expulsiones y el descontrol de los jugadores de Boca, que pudo haber sido más costoso si Pompei, de pésimo arbitraje, expulsaba a otro xeneize.
El futuro, como nunca en este semestre, es más negro que el azabache. En realidad, las chances en la Sudamericana están intactas, aunque para el Clausura habrá que prender varias velas. Basile, cuando te vayas a dormir esta noche, andá pensando dónde exiliarte si, por lo menos, no ganás un campeonato.

Pescado rabioso

Boca Juniors 0 - Colón 1

Se acabó el invicto como local, y lamentablemente el campeonato se puso más parejo que nunca.
En la jerga futbolera, se podrá decir que Colón es un equipo botón, de esos que andan mal pero que a uno siempre lo complican. Al igual que su arquero Tombolini, que fecha tras fecha es un desastre, pero justo contra Boca se acuerda de que tiene manos.
¡Cómo duele esta derrota! Y no por cómo se jugó, ya que el primer tiempo de Boca fue muy bueno y en todo el partido convirtió al arquero visitante en figura del encuentro, además de estrellar 3 pelotas en los palos (no cuento la de Insúa porque ya estaba afuera y era corner).
Durante el primer tiempo Boca tomó el protagonismo y tuvo varias situaciones de gol. Tanto Palacio como Palermo y Cardozo tuvieron varias en sus pies. Sin embargo, la más clara de esa mitad fue la que el 8 de Colón, Cominges, tiró afuera con todo el arco a su disposición. Esa era una clara señal de lo que pasaba en el partido: Boca atacaba y Colón se defendía pero salía muy bien de contragolpe.
El segundo tiempo arrancó parecido al primero, con el xeneize atacando y Colón esperando para salir de contra. Pero Boca se cansó, y encima, llegaron las lesiones. En esta etapa se veía a un equipo cansado, con poca recuperación y cada vez sufriendo más situaciones en contra, pese a que iba e iba a buscar los 3 puntos.
Faltando 8 minutos, luego de una mala salida del fondo, se originó el ataque que culminó con el único gol del partido y selló el resultado final.
Si bien se viene una terrible seguidilla de partidos y el cansancio y las lesiones empiezan a aparecer, yo confío más que nunca en nuestro equipo. Hoy no se jugó tan mal como nos quieren vender, y de ninguna manera merecimos perder. El equipo puso todo, la hinchada también, y aún jugando así somos serios candidatos. A no olvidarse: todo depende de Boca.

Boca es Internacional

Boca Juniors 4 - Internacional (Brasil) 1

¡Otra noche épica en la Bombonera! Otra jornada mítica para agrandar aún más las historias coperas que bien atesoramos los hinchas xeneizes. Otro partido que la mitad más muchos de la Argentina guardaremos por tiempo en nuestras retinas.
Para pasar a semifinales en forma directa, Boca debía ganar por dos goles de diferencia. Y esto no pintaba nada sencillo: enfrente había un rival brasilero y el gol de visitante se sufriría doble.
Pero Boca salió a atropellar al Inter, y lo logró. A los 6 minutos, Palacio anotó el primero. Y en el primer cuarto de hora, el resultado ya le quedaba chico al partido. Boca fue muy superior a su rival, y en la primera mitad lo pasó por arriba, salvo contados minutos en los que la visita pudo hacerse del balón.
El segundo tiempo fue para el infarto. Inter arrancó mejor, adueñándose de la pelota y superando a Boca en el medio. Sobis reventó el travesaño y una alarma se encendía en el fondo auriazul. Y lamentablemente, a los 20 minutos llegaría el empate. Un empate que obligaba a hacer dos goles en 25 minutos para acceder a la semifinal.
Luego de momentos de zozobra y de cambios acertados (Guillermo, Guillermo...) una ráfaga nos devolvió vida en esta Copa Sudamericana versión 2005. Primero, un centro espectacular de Krupoviesa y un mejor cabezazo de Palermo. Y luego, un centro pasado y una asistencia de Schiavi para que Palacio anotara el segundo en su cuenta. Sí, el Flaco poniendo una pelota bárbara de gol.
Con el 3-1, la cosa estaba un poquito más tranquila, pero un gol visitante nos dejaría en Pampa y la vía. Hasta que en tiempo de descuento, llegaría el hattrick de Palacio y la noche terminaría en fiesta. Una fiesta que, aún con la incertidumbre del resultado, ya había desatado La 12 en todas sus tribunas.

San Paolo

Boca Juniors 81 - River Plate 77

¡San Paolo! No se trata del mítico estadio del Napoli, sino del santo del baloncesto que tiene el equipo xeneize.
Faltaban pocos minutos para el final del partido, y Boca perdía por 11 puntos el clásico porteño de la Liga Nacional de Básquet. Pero apareció Paolo Quinteros, y metió una ráfaga de puntos para dar vuelta el resultado y llegar a los 29 puntos en su haber.
Con este triunfo, Boca se mantiene como puntero en la Zona Sur.

Punto que suma

Banfield 1 - Boca Juniors 1

Hace escasas horas se completó la fecha 13 del Torneo Apertura 2005, que tuvo el lunes pasado la presentación de Boca en el sur del Gran Buenos Aires. Tal como se suponía, iba a ser un partido chivo, trabado y donde los dos equipos tendrían que cuidarse mucho de la pelota parada. Sin embargo, dentro de ese contexto, Boca fue quien mejor manejó la pelota y creó más y mejores situaciones de gol. Ya Luchetti se perfilaba como figura de la cancha.
El segundo tiempo arrancó de manera similar al primero, con poco fútbol, mucha lucha, y Boca como protagonista. A medida que pasaban los minutos, se notaba que el xeneize cada vez más demostraba que era quien quería los 3 puntos, y empezaba a hacer méritos para obtenerlos.
Pero luego de desperdiciar algunas jugadas, llegó como un baldazo de agua fría el gol de Banfield. El resultado era injusto, y Boca tenía 15 minutos para buscar el empate y algo más. Un empate que llegó de la mano de Palacio, o mejor dicho de su cabeza, poniendo un poquito más de justicia en el score. Los minutos finales mostraron a un Boca mucho más ambicioso que su mezquino rival, pero no alcanzó. De todas formas, no hay que menospreciar el punto obtenido, que nos permite alejarnos un poquito más de Vélez, aunque recién estemos por entrar en la recta final del campeonato.